
Leyendo un número atrasado de la revista de literatura Quimera me entero de que Vladimir Nabokov, antes de morir, mandó quemar su novela inacabada ✅ The original of Laura , y que ahora sus herederos no acaban de decidir si deben seguir las indicaciones del escritor o bien lanzar la obra al mercado. Esta historia nos remite al asunto de Kafka y su editor, Max Brod . El primero, casi inédito en vida, le pidió al segundo que quemara todos sus manuscritos. Si ahora disfrutamos de los libros de Kafka es porque Brod fue un chico desobediente y pasó esos textos no por el fuego sino por el tráfago de la imprenta.