Me gustan los artículos de escritura pequeñitos. De hecho, últimamente me he acostumbrado a llevar siempre conmigo una pluma estilográfica y un bolígrafo, a cuál de ellos más reducido. La ventaja es que, como el saber, apenas ocupan lugar. :–)
Pero hoy quiero daros un consejo: no hagáis como yo, que muchas veces los llevo sueltos, bien en el bolsillo de mi bandolera o incluso en el bolsillo del abrigo, ahora que hace frío.