¿Se siguen vendiendo las plumas estilográficas, o son un producto obsoleto?

Hace unos días mantuve una breve conversación con una amiga sobre cuáles serían los productos de papelería más demandados en estas fechas. Yo comenté que quizá, a modo de regalo navideño, las plumas estilográficas serían la estrella, pero ella repuso que hoy día, cuando todo el mundo escribe a ordenador, las plumas estilográficas no se venden.

Me sorprendió un poco su comentario: hace unos meses me encargaron la redacción de un artículo genérico sobre las plumas estilográficas, y aunque no tuve que documentarme con índices de ventas ni nada similar, me pareció que se trataba de una industria que mantiene bien el tipo.

En ese artículo citaba de pasada marcas conocidas como Montblanc, Faber-Castell, Dupont, Artisome, Pelikan, Lamy, etcétera, y deduje que si esas casas eran citadas aquí y allá era porque el negocio no debía de ir mal. Pero quién sabe: a veces uno se deja engañar por percepciones personales…

Plumas estilográficas, para amantes de la escritura a mano

Recordé también que mi padre –que nunca aprendió a escribir a máquina ni en el ordenador– era aficionado a escribir a mano y  se jactaba de tener buena caligrafía, lo cual era cierto. En su despacho siempre había alguna pluma estilográfica. Estoy seguro de que no se afanaba en buscar una marca determinada, y que se apañaba con cualquier pluma, pero allí estaban, siempre a su disposición. No era ni mucho menos un coleccionista, sino más bien un simple usuario.

Montblanc 145 - Pluma estilográfica
  • Perfecto como regalo de Navidad
  • Incluye clip chapado en oro
  • Contiene plumín de oro
  • Permite el uso de los cartuchos de tinta

Plumas estilográficas: un buen botín

Y por recordar que no quede… vino también a mi mente la noticia de prensa del tipo que se había dedicado a robar once plumas estilográficas en una vivienda de Valencia. Al ladrón lo pillaron y las once plumas fueron exhibidas en una fotografía de la policía, como si de un botín de heroína se tratara. (Podéis verlo aquí). El dueño de las plumas, que eran de gran valor (Montblanc, Dupont, Cartier, Parker Cross, Watterman y Pelikan), pudo recuperarlas gracias al buen hacer de las fuerzas del orden. No sé cuánto costarían en el mercado negro, pero intuyo que el ladrón hubiera sacado una buena pasta.

O sea que las plumas, además de ser artículos de oficina, pueden ser considerados pequeñas obras de arte de gran valor que “merece la pena” robar…

Ningún producto encontrado

Bueno, a lo que íbamos: ¿se venden o no se venden las plumas estilográficas?

He buscado información al respecto y he leído en El Economista que la pluma estilográfica es un producto que factura más de mil millones de dólares al año. Lo que nos chiva este artículo es que la pluma estilográfica, aun no siendo un producto de consumo masivo, tiene una legión de fans, algunos de los cuales están felices de pagar precios altísimos por ciertas piezas:

Los fans de las plumas estilográficas están ahí fuera. Algunos dispuestos a pagar 1,4 millones de euros por una Montblanc, la Johannes Kepler High Artistry Stella Nova Limited Edition 1, decorada con 570 diamantes y 5.294 zafiros para recrear la Vía Láctea. En una subasta en 2010, se pagó 8 millones por la ‘Fulgor Nocturnus’ de Tibaldi, que estaba decorada con 945 diamantes negros y 123 rubíes.

La casi erradicada pluma estilográfica ha logrado sobrevivir al paso del tiempo convirtiéndose en un objeto de lujo y coleccionismo. Los expertos de Euromonitor aseguran que las ventas mundiales de este producto subieron un 2,1% en 2016, con una facturación de 1.046 millones de dólares, en una época en la que el mercado de bienes de lujo está estancado. A nivel mundial, las ventas del sector han crecido más y más cada año de la última década, salvo en 2009”.

Es decir, que la pluma sigue viva y se vende cada año más, como demuestra la última frase del texto entrecomillado.

No podemos enterrar prematuramente a la pluma estilográfica –ni falta que hace. Puede que el uso de las nuevas tecnologías haya mermado su popularidad, pero siempre habrá personas que sigan disfrutando de la escritura a mano, esas personas a quienes les gusta mancharse un poco las manos de tinta y ven el recambio de cartuchos un ritual digno de ser preservado. La pluma estilográfica es pues un artículo fetiche y, ya puestos, un regalo muy adecuado para estas fechas.

Si está obsoleto o no, decídanlo ustedes.

[amazon_link asins=’B001HAYCN8,B01J9DIRDU,B01B3HGYEY’ template=’ProductCarousel’ store=’067699289644′ marketplace=’ES’ link_id=’9cc40bc2-f06b-11e7-9686-4373390ac4c3′]

Artículos relacionados

Última actualización el 2023-09-28 / Enlaces de afiliados / Imágenes de la API para Afiliados

Plumas estilográficas | Bolígrafos | Estilógrafos | Diccionarios | Libros | Moleskine | Cuadernos | Montblanc

Suscríbete para recibir las novedades una vez por semana

(Nota: narrativabreve.com participa en el programa de afiliados de Amazon, y como tal se lleva una pequeña comisión por cada compra que el cliente haga en Amazon después de entrar por alguno de nuestros enlaces).

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

ESCRIBIR Y CORREGIR participa en el programa de afiliados de Amazon, y como tal se lleva una pequeña comisión por cada compra que el cliente haga en Amazon después de entrar por alguno de nuestros enlaces.