Libros
Forrar libros es una declaración de amor (a los libros, claro)
Obviamente, los forralibros, aun usándose durante todo el año, tienen mayor demanda al principio del curso. Su gran tirón está ahí, desde luego, pero también son usados para convergar tesoros culturales. libros antiguos, revistas añejas pero gran valor intelectual, diarios, blocs de notas, publicaciones descatalogadas…
En fin, cualquier libro es susceptible de ser forrado, pues “forrado” y “cuidado” vienen a ser sinónimos. Forrar un libro es una declaración de amor… al propio libro. :–)
Libros viejos (Juan Van-Halen)
Se dice que los libros de viejo han perdido atractivo, que la gente prefiere las modernas ediciones más cuidadas y muchas veces más ventajosas. Creo que no es así. El libro viejo es un objeto de historia, casi humano, con vida atrás de la que no se avergüenza. Cuántas cosas habrán visto los libros de viejo. Como todo, han tenido sus defensores y sus detractores. Baroja, Azorín, César y Federico Muelas, a quienes los libreros de viejo rindieron un homenaje, han sido o son amigos suyos.
Capital de la gloria: el horror del Madrid bélico y la espléndida literatura de Zúñiga
Por José Luis Ibáñez Salas Hace algunos años leí un libro de relatos escrito por Juan Eduardo Zúñiga, era un magnífico libro pequeño de cuentos con el Madrid de la Guerra Civil como protagonista, más que como telón de fondo. Recientemente quise completar mi lectura de la trilogía de la que aquel libro formaba parte … Leer más
Relato corto: Ancestros (de Hombres, hombrinos, macacos y macaquinos)
Me complace compartir con vosotros la noticia de que he publicado otro libro de relatos cortos. En este caso, he optado por hacer una edición en ebook para Amazon. El libro se llama Hombres, hombrinos, macacos y macaquinos, y consta de 22 historias cortas. Hay mucha variedad no solo en la extensión de las narraciones, … Leer más
Francisco García Pavón y Tomelloso. Una sola carne
Francisco García Pavón fue un escritor manchego que se paseó por esta forma de hablar. En sus escritos siempre hubo un lugar para los «mancheguismos». A veces es muy divertido imaginarse cómo hablaba el policía Plinio, uno de sus más famosos personajes. Plinio es guardia municipal de Tomelloso, lo conoce todo el mundo y tiene un amigo inseparable, don Lotario, con el cual acude a los sitios del suceso cuando se produce algún robo, secuestro o asesinato.